Vaya por delante que sí, admitimos que hay un virus que afecta, contagia y a algunos se los lleva. Pero ya está bien de cargar siempre contra los ciudadanos. Alguien tiene que parar esta locura, esta huida hacia adelante sin razón y sin frenos. El emperador está desnudo y eso es algo que muchos ya afirman en privado, el asunto es ver quién se atreve a gritarlo en público, y ahí tenemos el problema: los pocos que nos atrevemos a cuestionar el traje del emperador, esto es, las medidas desproporcionadas que se están aplicando para atajar la pandemia, somos inmediatamente descalificados, bien por colocarnos la etiqueta despectiva de negacionistas, terraplanistas, iluminatis, egoístas, insolidarios o fascistas, o bien porque no tenemos un título científico que avale nuestras afirmaciones y por tanto no sabemos nada ni podemos hablar de nada con propiedad. ¿En este punto qué puede hacer alguien como yo, que se define ciudadano del mundo, escritor y activista social? Pues justo eso, seguir escribiendo, aunque sean pocos los que me lean y aún menos los que se activen. Y dado que no soy científico ni titulado en nada, me voy a ahorrar la parte de intentar convencer a nadie con estudios de investigación o razonamientos técnicos, limitándome a hacer este llamamiento urgente a los que tienen voz autorizada cómo científicos, y a los que tienen los altavoces y los micrófonos como periodistas.
Es su hora señores, señoras, periodistas, biólogos, médicos, investigadores. Aumentan los contagios en Canarias y especialmente en Tenerife, si esto no cambia -no tiene pinta de hacerlo con el protocolo que se sigue-, ya sabemos lo que viene: PCR masivas a 45 ciclos a gente que en apariencia no tiene nada, muchos positivos sin síntomas, teoría de los aerosoles, los asintomáticos contagian, peligro, hay que limitar la vida social, la culpa es de los jóvenes, de las familias, hay que limitar las reuniones a 4 personas, toque de queda, negocios cerrados, la economía al carajo, pero no importa, y así un largo etcétera de limitaciones y prohibiciones en cascada. La cuestión es que pese a ser los españoles los europeos que más cumplen con las medidas de confinamiento –no dudo que los canarios entre los que más-, los contagios siguen en aumento y los expertos oficiales no dan con el origen ni con la solución. ¿Qué será lo próximo?: ¿todos encerrados en casa?, ¿limitarán las reuniones a dos personas? Esto es de locos. Por favor paren ya. Dejen de cargar siempre contra el pobre y sufrido ciudadano. Por cierto, ¿se han parado a pensar por un momento cómo deben de tener la cuenta corriente los políticos y los expertos que dictan las normas y aplican las prohibiciones? De seguro con bastante más ceros a la derecha de los que necesitan para llevar una vida mínimamente digna. Claro, así es muy fácil aplicar medidas que arruinan a la gente, a ellos no les toca. Pero ya está bien, y alguien tiene que decir basta. Otro asunto es saber quién puede decir basta. Si esperamos por la gente, aquí en Canarias la mayoría andan buscándose la vida como pueden para no perderse en el intento, y los que tienen algo de tiempo para protestar lo hacen descargando su ira y su frustración con los inmigrantes, enarbolando banderas de violencia y otras patrias lamentables. En cuanto a los políticos, por desgracia hace tiempo que dejamos de esperar nada bueno de ellos. Así las cosas, solo nos quedan ustedes, periodistas y científicos.
Invitación para los primeros, servidores del derecho a recibir una información veraz (artículo 20 de la Constitución Española): ¿por qué no se salen del discurso único ahora que estamos viendo que los expertos oficiales no parecen resolver nada?, ¿por qué no entrevistan y dan voz a los expertos que dicen cosas diferentes?, ¿por qué no le preguntan a esos otros expertos qué pasa con las PCR? ¿Porque no entrevistan a Pieter Borger, a Rajesh K. Malhotra, a Michael Yeadon, a Clare Craig, a Kevin McKernan, a Klaus Steger, a Paul McSheehy, a Lidiya Angelova, a Fabio Franchi, a Thomas Binder, a Henrik Ullrich , a Makoto Ohashi, a Stefano Scoglio, a Marjolein Doesburg-van Kleffens, a Dorothea Gilbert , a Rainer J. Klement , a Ruth Schruefer, a Berber W. Pieksma, a Jan Bonte, a Bruno H. Dalle Carbonare, a Kevin P. Corbett o a Ulrike Kämmerer? Son científicos, también son expertos, lo son de talla mundial, y el 27 de noviembre publicaron un Informe de Revisión donde desmontan punto por punto el procedimiento PCR que fue aceptado tras el Informe Corman-Drosten y exigen a Eurosurvellaince (organismo de vigilancia europeo) que se retiren las PCR como prueba diagnóstica. Sobre este informe al que aludo, lo cierto es que aún sin ser experto me he molestado en leerlo, y dice cosas que impresionan, les cito un párrafo a modo de muestra: “Este estudio demostrará numerosos fallos graves en el artículo Corman-Drosten, cuya importancia ha llevado a un diagnóstico erróneo en todo el mundo de las infecciones atribuidas al SARS-CoV-2 y asociadas con la enfermedad COVID-19. Nos enfrentamos a estrictos bloqueos que han destruido la vida y los medios de subsistencia de muchas personas, el acceso limitado a la educación y estas restricciones impuestas por los gobiernos de todo el mundo son un ataque directo a los derechos básicos de las personas y sus libertades personales, lo que resulta en daños colaterales a economías enteras en una escala global.”
Pienso que a partir de evidencias como esta, ya que son periodistas, podrían investigar cómo y a quién se hacen las PCR en Canarias. ¿Por qué a los canarios PCR y a los turistas test de antígenos?, ¿no les parece sospechoso y discriminatorio? En el Hogar Santa Rita II por ejemplo, me cuentan que estaban los ancianos muy tranquilos hasta que un día llegaron a hacer PCR. ¿No les parece raro tantos contagios asintomáticos? ¿Y casi una veintena de contagiados entre los trabajadores de Santa Rita la mayoría jóvenes y sanos en apariencia? También podrían reparar en la relación proporcional directa entre PCR que se hacen y número de contagiados. Otra cosa de la que no se habla, por ejemplo, lo de la gripe, ¿por qué este año nadie se contagia ni muere de gripe? Extraño milagro del covid-19. Y así un largo etcétera de temas sobre los que la gente tiene derecho a saber, porque están pasando y no nos lo están contando.
Sí, ya sé que los periodistas, la mayoría cumplen órdenes y no pueden decidir qué contar y qué no. Pero el momento lo requiere, necesitamos de periodistas valientes, y además es un derecho, los ciudadanos merecemos que se nos cuente lo que está pasando, y no únicamente lo que los que mandan quieren que sepamos. Y esta misma invitación urgente va para los científicos, ustedes saben y son personas autorizadas, lo que ustedes desde su academia puedan decir será tenido en cuenta, mucho más de lo que yo pueda escribir o contar en 20 años, y también hicieron un juramento, ético, hipocrático, si son médicos, si son biólogos. En cualquier caso, este es su momento, vamos, no tengan miedo, hablen, se los pido por favor.
Eloy Cuadra, escritor y activista social.
Este es el enlace oficial del Informe de Revisión al documento Corman-Droster.
https://cormandrostenreview.com/report/
Aquí el documento traducido al español:
https://contraelencierro.blogspot.com/2020/12/review-report-corman-drosten-et-al.html