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El odio de las dos Españas 70 años después

Yo no estaba cuando las dos Españas se enfrentaron a sangre y fuego, sólo me lo han contado, y lo he leído, hermanos contra hermanos, amigos contra amigos, con un odio que dejó casi un millón de muertos, más de 100.000 desaparecidos y cuarenta años de destierros y persecuciones.
-guerra2.jpg de Producción ABC-
El otro día mataron en León a una señora de cinco disparos en plena calle, la señora ostentaba algunos cargos públicos, parece ser que fue alguien de su mismo partido político. Lo que he visto, leído y escuchado en estos últimos días me hace temer que ese terrible odio que vivieron nuestros padres y abuelos enfrentados en esas dos Españas sigue hoy todavía muy vivo.
El PP, la derecha, sus medios y ciudadanos afines, rápido cargan las culpas contra un supuesto caldo de cultivo antipolítico larvado en nuestra sociedad por los indignados, por los escraches y en general por los movimientos sociales críticos con el sistema. En el otro lado muchos, escondidos en el anonimato, muestran su desprecio y hasta su alegría por la muerte de una persona, y entretanto, yo sólo veo odio, rencores y cegueras colectivas. Y mira que hemos tenido la suerte dentro de la desgracia, de que casi al instante se ha sabido que las probables asesinas eran miembros del mismo partido que la asesinada, y nada tenían que ver por tanto con colectivos sociales críticos, ni con Ada Colau, ni con ningún ciudadano indignado. No quiero ni pensar qué habría pasado si las ahora detenidas acusadas del asesinato lo hubieran hecho de tal forma que no las hubieran pillado ni sospecharan de ellas. El ejercito estaría ya en la calle con los fusiles apuntando.
isabel carrasco
Cierto que al parecer la fallecida había llegado a tener hasta 12 cargos públicos y había podido cobrar hasta 150.000 euros al mes, sino más, durante bastante tiempo. Pero, ¿acaso nos debe importar eso? Ningún ser humano por muy mal que lo haga merece morir así. ¿Qué clase de locura es esta?
Bueno, entiendo, ustedes, señores políticos de clase, han vivido tan bien durante tantos años que ahora les cuesta hacerse a la realidad, no quieren perder sus privilegios y al tiempo les molesta que la calle les desprecie. Pero señores, en tiempos de crisis no se puede tener todo. Entiéndanlo, cuando la mayoría de la población sufre, los privilegios van de la mano con el desprecio, así es y así ha sido desde que el mundo es mundo. Así era en la Edad Media, con la única diferencia que entonces el miedo de la masa era mucho mayor al desprecio, y todos callaban. Hoy algunos empiezan a perder el miedo y su desprecio es patente, y ustedes lo notan. Entonces está claro: si quieren aprecio empiecen por renunciar a algo.

Les guste o no, esta es la lectura que deben hacer, ustedes, señores de la clase política, en lugar de vestirse de víctimas. No pinten como un crimen político gestado por los enemigos de lo político lo que está más próximo a un ajuste de cuentas entre personas que trabajaban juntas. Sí, ya sé que es muy goloso el incidente, nos lo explicó Naomi Klein hace años con su “doctrina del shock”, entiendo lo propicio que es para ustedes este dramático fallecimiento, les viene que ni pintado para implantar nuevas medidas de choque con las que asegurar su estatus privilegiado y apretar más a la población, pero, ¿qué pasará con los que no se dejen apretar? ¿Vamos a resucitar a las dos Españas enfrentadas, otra vez, 70 años después?
bandera 2 españas
Y una cosa más, no llamen a los antisistema, a los indignados, a los movimientos sociales críticos movimientos antipolíticos, porque todos estos entre los que yo me incluyo, lo que hacen es política precisamente y no otra cosa. Cierto que ustedes se gastan millones y muchos esfuerzos en tener a los ciudadanos asustados, entretenidos y anestesiados con la telebasura, el culto a lo superfluo, el deporte de masas y otros espectáculos folklóricos. Sabemos que esos son los ciudadanos que a ustedes les gustan, pero algunos escapamos a sus medidas de manipulación colectiva, ¿qué harán con nosotros?, ¿qué pasará cuándo seamos demasiados los despiertos?
Claro que, no sería justo si acabara mi reflexión sin hacer referencia a éstos últimos, a los despiertos, a los indignados, a los sufrientes. Creo que es más fácil que nosotros pongamos la cordura que ellos entren en razón y renuncien a sus privilegios, y cómo así lo creo, entiendo que lo mejor es que no caigamos en la senda abierta por el odio y la sinrazón, no hasta el punto de perder la sensatez y la humanidad y alegrarnos por la muerte de una señora o cargar contra ella, por muy mal que lo hubiera hecho, porque así, sólo les damos argumentos para que la llama del odio prenda una vez más.
utopia 8 mil kilómetros
Aunque, no sé, igual peco de excesivamente optimista por este lado, tanto cómo pesimista por el otro. Tal vez el odio y la ceguera están repartidos en igual medida por cada lado, tal vez tenía razón Nietzsche cuando decía, en su doctrina del eterno retorno, que el ser humano está condenado a repetir una y otra vez los mismos acontecimientos, en el mismo orden, tal cual ocurrieron. En fin, por una vez, me gustaría, que mi apreciado filósofo estuviera equivocado.

Eloy Cuadra